Cinco películas componen la programación en la Sala Teatro Timanfaya, con aforo limitado y refuerzo de las medidas de prevención
El ciclo Puerto de la Cruz, Otro Cine, una iniciativa del Área municipal de Cultura con la colaboración de la Sala Teatro Timanfaya y la productora Vector de Ideas, continúa en agosto su apuesta por el cine independiente, con una programación que pone de relieve temas como las relaciones familiares, la maternidad, el perdón o el medioambiente, con especial atención a la coyuntura entre el pasado y presente.
Las proyecciones, en versión original con subtítulos en español, comenzarán el lunes 2 con La mujer de la montaña, de Benedikt Erlingsson; proseguirán el día 9 con Nuestras madres, de César Díaz; el lunes 16 será el turno de la aclamada película de Susanne Bier Después de la boda; para continuar el día 23 con Pity, de Babis Makridis; y finalizar el lunes 30 con Platón, cine canario firmado por Iván López. Todas las sesiones comenzarán a las 20:15 horas, y son de acceso gratuito pero con aforo limitado, para lo que es preciso hacer reserva previa de la entrada a través de la plataforma Tickety.es.
Las personas que asistan al ciclo Otro Cine, a las que se recomienda llegar con suficiente antelación a la Sala Teatro Timanfaya para poder acomodarlas de acuerdo con las medidas de seguridad establecidas, deberán hacer uso de la mascarilla durante todo el visionado de la película. Asimismo, para acceder a la sala tendrán que aportar el certificado sanitario COVID-19: vacunal (para los mayores de 18 años) que pueden descargarse desde la web www.miCertificadocovid.com, de prueba diagnóstica (realizada en las últimas 72 horas) o de haber superado la enfermedad en los últimos seis meses.
La selección de los títulos que conforman este ciclo, que cuenta con el apoyo del Cabildo de Tenerife y el Gobierno de Canarias a través del Instituto Canario de Desarrollo Cultural (ICDC), se lleva a cabo de manera coordinada con la plataforma ciudadana Otro Cine, ejemplo del trabajo que se realiza en Puerto de la Cruz en el ámbito de la cultura, propiciando estructuras de participación transversal entre el sector público, la iniciativa privada y los colectivos ciudadanos.
Programación de agosto
La película La mujer de la montaña (Islandia, 2018) abre programación el lunes 2 de agosto con un cuento moderno de Benedikt Erlingsson que analiza, con originalidad y humor, la lucha individual en favor de la colectividad ante gigantes de la industria que atentan contra el medio ambiente. Su protagonista, Halla, se convierte en una heroína en tiempos modernos mientras mantiene una lucha interna ante la posibilidad de ser madre o seguir con el activismo ecologista.
La agenda para el siguiente lunes (día 9) incluye Nuestras madres (Guatemala, 2019), ópera prima de César Díaz quien, con un sólido guion aborda las consecuencias de la cruenta guerra civil en Guatemala en los años ochenta. En esta cinta, el director y guionista arma un relato que habla del silencio y el perdón dando protagonismo al testimonio de las mujeres.
Otro de los filmes que podrá verse el día 16 es el tercer largometraje de Susanne Bier Después de la boda (Dinamarca, 2006), donde profundiza en su interés por temas como las complejas relaciones familiares, la fascinación por el destino y la capacidad del ser humano para afrontar decisiones difíciles. Ganadora del Oscar a la Mejor Película de Habla No Inglesa, pasa de las complejidades de la ayuda humanitaria internacional a la intimidad familiar sin caer en el melodrama a través una estética cercana a la de Dogma 95.
También en agosto se proyecta Pity (Grecia, 2018), una comedia negra de Babis Makridis que analiza la mente de un personaje atormentado capaz de llegar a los límites por seguir sintiéndose desdichado y compadecido por la gente que lo rodea. Humor, inquietud y tragicomedia se entrelazan en el peculiar tono que se apodera de esta historia narrada con una estética minimalista.
La programación de agosto de Puerto se la Cruz, Otro Cine se completa el día 30 con Platón (Canarias, 2018) en la que Iván López conforma un universo emocional a través del retrato de la compleja relación entre Arián, un adolescente introvertido, y su madre, con la que no se habla y a la que culpa de que su padre los abandonara cuando él tenía apenas 2 años.